Por qué aparece el gas radón en las viviendas maneras de evitarlo

Seguramente habrás escuchado hablar del Gas Radón, pero… ¿Qué es exactamente?

El Gas Radón es un gas radiactivo y cancerígeno que procede de las rocas y suelos, es decir, se ubica en la propia naturaleza. Este tipo de gas no suele presentarse en niveles altos al aire libre, sin embargo lo podemos encontrar en nuestras viviendas, especialmente en zonas con suelos muy permeables.

Normalmente se encuentra más en las plantas subterráneas y en las primeras plantas. A medida que vamos subiendo de planta, se reduce. Es decir, a más altura, menor cantidad de radón.

La aparición o no de esta tipología de gas está estrechamente ligada a las características del terreno. Hay zonas geográficas que debido a su geología es más probable encontrar edificios con niveles elevados. El Consejo de Seguridad Nuclear clasifica todo el territorio nacional, identifica aquellas zonas que los edificios presentan concentraciones superiores a 300 Bq/m3, lo cual significa:

• El 90% de los edificios tienen una concentración inferior a 300 Bq/m3.

• El 10% supera este nivel.

En los últimos años, la UE obliga a los Estados miembros a establecer niveles nacionales de referencia para las concentraciones de radón en recintos cerrados y a adoptar medidas adecuadas para limitar la penetración del radón en los edificios.

Para cumplir con la exigencia de limitar la presencia del gas radón en las edificaciones se propone la modificación del Código Técnico de la Edificación (CTE) incluyendo una nueva exigencia básica de salubridad, la DB-H6 de protección frente al radón.

DB HS 6- Protección frente a la exposición del radón

Protección frente a la inmisión del gas radón en edificación

Las láminas impermeabilizantes y los aislamientos protegen al edificio de problemas estructurales al sellarlo, protegiéndolo de todo tipo de humedades.

Algunas entidades como el BRE (Reino Unido), el CSTB (Francia) o en la República Checa, nos hablan de sistemas constructivos con membranas por la cara exterior del elemento a proteger, solera o muro, o por la cara inferior. En ambos casos, la membrana funcionará correctamente como barrera contra el paso del radón.

Las barreras anti radón podrán calcularse según lo establecido en el apartado 3.1.2 de la sección HS 6 del DB HS o bien se considerarán válidas las barreras tipo lámina con un coeficiente de difusión al radón menor que  y un espesor mínimo de 2 mm. [i]

Esta normativa se aplicará a los edificios de nueva construcción y en rehabilitaciones de edificios existentes.

Contamos con una gama específica de láminas impermeabilizantes todas ellas recomendadas como barrera contra Radón para edificación. Disponemos de tres láminas certificadas por el Laboratorio de radiactividad Ambiental de la Universidad de Cantabria, en concreto las láminas POLITABER COMBI 40, POLITABER COMBI 48 y la ChovAPLAST Alum BV 30.

LAS BARRERAS ANTI-RADÓN SON UNA DE LAS MANERAS MÁS EFECTIVAS DE COMBATIR LA PRESENCIA DE ESTE GAS EN LAS VIVIENDAS